domingo, 25 de octubre de 2009

Los males de una elección aburrida


Chile entra en tierra derecha. Ya no queda nada para las elecciones presidenciales y parlamentarias, y somos testigos de una de las contiendas más decadentes de la historia, donde el aporte sabroso a la discusión lo hacen las descalificaciones entre los candidatos, donde la política se ha centrado más que nunca en las caras o en los grupos representados, dejando a un lado como si no importaran las ideas, las propuestas, el proyecto para construir un mejor país, o la ideología que sustenta e impulsa aquel deseo de gobernar. Se convirtió en una práctica casi religiosa ver a candidatos sacándose los trapitos al sol, tratando de hacer entender al electorado que todos los contrincantes tienen un pasado o incluso un presente obscuro, o acusando cosas que solo ellos parecen saber. ¿Qué importa que un Marco Enríquez - Ominami, conocido popularmente conocido como ME-O en los chats para abreviar su nombre, haya dicho que su nacionalidad chilena era una desgracia hace siete años? ¿Tan grave es el no saber cuál es la verdadera fortuna de Eduardo Frei? ¿Por qué Sebastián Piñera no frenó la compra de acciones en Linea Aerea Nacional (LAN) para evitar la multa de la Superintendencia de Valores y Seguros? Aquí hay tres argumentos sólidos para derribar cualquiera de estas tres candidaturas, pero nos damos cuenta que se trata de achicar al que está al lado y no demostrarle al país cuáles son su cualidades a la hora de asumir una misión de magnitudes tan monumentales como administrar un país. El país necesita medidas efectivas para frenar los índices de delincuencia y percepción del miedo, con la cobertura de la educación casi en un 100%, hace falta saber cómo lograremos una educación de calidad para todos, sin distinguir clases sociales, cómo y de donde sacarán fondos para evitar en materia de salud problemas tan bochornosos como los sucedidos en el Hospital de Talca. En ese sentido, ME-O ha sido el único que ha señalado categóricamente que impulsará una Reforma Tributaria, donde los grandes empresarios deberán pagar más impuestos. El problema de la cesantía también es fundamental, más aún cuando recien se empiezan a ver las primeras señales de reactivación. ¿Cómo se financiará el millón de empleos que propone Piñera? Frei, ha dicho que será la continuidad de la Presidenta Michelle Bachelet, pero eso ¿quiere decir que gobernará con los mismos y la tan divulgada renovación de liderazgos no sucederá en su mandato? Piñera representa al sector de los grandes empresarios, de los conservadores, de la derecha tradicional chilena, mostrándose él con una cara mucho más liberal que el Presidente de su mismo Partido, Carlos Larraín, de Renovación Nacional, o que sus pares de la Union Demócrata Independiente, cuya arista más conservadora lleva como símbolo al Diputado José Antonio Kast. Le falta al empresario RN explicar al país cómo va a gobernar con un sistema de mercado que el año pasado demostró falencias gravísmas, las que sumieron a Estados Unidos y al mundo entero en una profunda crisis. A Frei se le cuestionan los errores cometidos en su gobierno, entre 1994 y 2000, además de su curioso giro hacia el progresismo, proponiendo incluso nacionalizar el agua, cuando fue su gobierno el que la vendió a privados. La propuesta de Enríquez - Ominami, Diputado Independiente, ex socialista, trae frescura y juventud, pero eso mismo pone en tela de juicio su experiencia, y la que pueda poseer el equipo con el que pretende gobernar. Además, su transversalidad política e ideológica, deja entrever un trasvestismo exacerbado, utilizado con el afán de captural más votos, especialmente de sectores de centro y derecha.

Arrate y la izquierda: Una enfermedad crónica
Lo de Jorge Arrate es aún más complejo. Si bien es el candidato que menos ataques ha recibido de parte de sus contendores, su poco impacto mediático lo tiene virtualmente descartado para una segunda vuelta. Su problema es el mismo mal crónico que parece afectar a la izquierda extraparlamentaria, que desde el regreso a la democracia está estancada en votaciones paupérrimas, por lo que no se ve realmente una proyeccion a mediano plazo para efectivamente ser gobierno.

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